Cómprame un castillo, es exactamente eso, una solicitud sincera y directa para que dejes tu aporte en mi Hucha Para el Castillo
A cambio, podrás decir que has contribuido para la compra de un Castillo. Si te vuelves loco y donas una cantidad de dinero verdaderamente obscena, es posible que hasta te sirva para desgravar en Hacienda, pero yo ahí ya no me meto.
Nunca sabré quiénes han dado dinero para comprar mi Castillo, pero cuando lo consiga, yo me comprometo a:
Si tú me escribes diciendo que has ayudado a llenar la hucha del Castillo, aunque no pueda comprobarlo, seré tu anfitrión durante un fin de semana, en el que te alojaré en mi propiedad.
Palabra de Macleod.
Si tus finanzas actuales no te dejan libre ni un euro, entonces
te invito a leer algún Capítulo de Muestra del libro que elijas.